La presencia de Dios renueva y fortalece nuestra vida. Podemos leer en la Biblia que en Su presencia hay plenitud de gozo y es por esa razón que debemos buscar estar en esa relación para sentir Su presencia.
“Me mostrarás la senda de la vida; en tu presencia hay plenitud de gozo; delicias a tu diestra para siempre.” Salmos 16:11
Y sí, nos prometió Su presencia en nuestra vida, pero le tenemos que invitar. Cuando pedimos a Dios que viva en nuestro corazón y sea nuestro Señor y Salvador, contamos con Su presencia. Y no podemos huir de Él, nos toma de la mano cuando le pedimos y no nos suelta más.
¡Jamás podría escaparme de tu Espíritu! ¡Jamás podría huir de tu presencia! Salmos 139:7
Sin la presencia de Dios nos sentiremos perdidos
Necesitamos tener a Dios en nuestra vida, porque de lo contrario, nos sentiremos perdidos. Dios nos da esperanza, nos fortalece en nuestra fe y nos da herramientas para huir de los malos caminos. Con Su presencia, y solo acompañados de Él, podremos sentirnos plenos.
Si buscas a Dios con todo tu corazón, no importa cuánto has hecho mal, no importa cuán lejos hayas tratado de huir de Él, lo hallarás. No olvides nunca que Dios no solo es Todopoderoso, también es Omnipresente, lo que significa que puede estar en todas partes. Por tanto, si lo buscas, lo encontrarás.
“Si me buscan de todo corazón, podrán encontrarme.” Jeremías 29:13
Es hermoso vivir buscando a Dios. Limpiemos nuestro corazón y nuestra mente y busquemos de Dios. Podemos llevar una vida vibrante en Su presencia, una vida mucho más satisfactoria y segura porque sentiremos Su respaldo en todo momento. Haz la prueba.
