En varias ocasiones he visto la mano y la misericordia de Dios ante las aflicciones y necesidades que he pasado; en la actualidad, con esta pandemia que está viviendo en el mundo entero, de igual manera sigo siendo testigo del Poder de Dios, y una de las promesas en la que me mantengo con fe es Isaías 41:10 (RVR1960) que dice: “No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.”

¿Qué estás haciendo para que tu fe no decaiga? ¿Sobre qué te estás apoyando? Hoy más que nunca necesitamos aferrarnos a Dios, a sus promesas y confiar que cualquiera sea la aflicción que nos sobrevenga ¡Él no nos desamparará!

Ante el temor, ansiedad o preocupación recuerda quién es tu Dios, qué ha hecho por ti antes, ¿acaso Él ha cambiado para dejarte sin cuidado?  Dios no cambia, lo dice en su Palabra: “Porque yo Jehová no cambio; por esto, hijos de Jacob, no habéis sido consumidos.” Malaquías 3:6 (RVR1960) por ello pon tu esperanza nuevamente en Él y agradécele por todo lo que seguirá haciendo en tu vida.Hoy igual que ayer

Quien te sostuvo antes no dejará de hacerlo por más oscura que parezca tu situación ¡Sostente de las promesas de Dios!