Te has preguntado alguna vez, ¿por qué la vida cristiana no es fácil? La respuesta es porque vivimos en un mundo gobernado por satanás. La Biblia menciona que el diablo es el príncipe de este mundo y el dios de este siglo (Juan 14:30; 2 Corintios 4:4).

No pertenecemos a este mundo

Cuando viajas a otro lugar, eres un extranjero y las cosas no son tan fáciles como en tu propia ciudad. Muchas veces no entiendes el idioma de la gente, no te acostumbras a la alimentación, sufres porque estás lejos de tu familia y corres constantemente peligros porque estás en un lugar ajeno.

De manera similar, nosotros los que hemos aceptado a Jesús como nuestro Señor y Salvador, no pertenecemos a este mundo. Nuestro hogar esta en el cielo.

En cambio, nosotros somos ciudadanos del cielo, donde vive el Señor Jesucristo; y esperamos con mucho anhelo que él regrese como nuestro Salvador.
Filipenses 3:20 

Prepárate para tu retorno

Probablemente estás en un momento donde todo te sale mal, donde no ves una salida a tu situación, las cosas empeoran, todo se complica y sientes que ya no sabes qué hacer. Recuerda las palabras de Jesús:

No dejen que el corazón se les llene de angustia; confíen en Dios y confíen también en mí. En el hogar de mi Padre, hay lugar más que suficiente. Si no fuera así, ¿acaso les habría dicho que voy a prepararles un lugar? Cuando todo esté listo, volveré para llevarlos, para que siempre estén conmigo donde yo estoy. Y ustedes conocen el camino que lleva adonde voy.
Juan 14:1-4  

Ten presente que esta tierra no es nuestro hogar, no pertenecemos aquí y pronto volveremos a nuestra patria celestial. Por lo tanto, prepárate para tu retorno, ocupándote de hacer la voluntad de Dios, buscándolo en todo tiempo, consagrándote y viviendo en santidad.