Quién no quisiera una vida cómoda y sin problemas, sin embargo es importante tener presente que Jesús advirtió que en el mundo tendríamos aflicciones pero que confiemos, pues Él estaría con nosotros.

Hay una guerra inevitable y no una vida cómoda

Hoy en día, mucho más que antes, todo parece estar en contra de los principios cristianos, la verdad es atacada y como dice la Palabra, a lo bueno lo llaman malo y a lo malo lo llaman bueno.

Como cristianos no debemos ignorar que hay una guerra inevitable, y que nosotros formamos parte de ella como hijos de Dios. Pues como conocedores y hacedores de la verdad no podemos quedarnos callados y sin hacer nada.

Sin embargo, necesitamos indudablemente de Dios, para tener la fortaleza y hacer frente a todo lo que está pasando, no solo en el mundo sino en nuestras propias vidas.

Por lo demás, hermanos míos, fortaleceos en el Señor, y en el poder de su fuerza.
Efesios 6:10 (RVR 1960)

Ponte la armadura de Dios

El Apóstol Pablo, dio una importante instrucción a los efesios:

Por lo tanto, pónganse todas las piezas de la armadura de Dios para poder resistir al enemigo en el tiempo del mal. Así, después de la batalla, todavía seguirán de pie, firmes.
Efesios 6:13 (NTV)

Es un error pensar que si somos cristianos debemos vivir tranquilos y cómodos, es todo lo contrario, porque siendo así no nos pedirían que nos alistemos para una guerra, aunque sea una referencia simbólica.

Efesios 6:14-18 (NTV) dice:

«Defiendan su posición, poniéndose el cinturón de la verdad y la coraza de la justicia de Dios.»
«Pónganse como calzado la paz que proviene de la Buena Noticia a fin de estar completamente preparados.»
«Además de todo eso, levanten el escudo de la fe para detener las flechas encendidas del diablo.»
«Pónganse la salvación como casco y tomen la espada del Espíritu, la cual es la palabra de Dios.»
«Oren en el Espíritu en todo momento y en toda ocasión. Manténganse alerta y sean persistentes en sus oraciones por todos los creyentes en todas partes.»

Es muy importante considerar que en cada lucha no estamos solos, Dios está con nosotros y que su paz y fortaleza nos permitirá ganar cada batalla y además seremos la luz que necesita este mundo.

No busques una vida cómoda, busca la voluntad de Dios y lo demás será añadido.